
Esta enfermedad puede causar dolores en articulaciones, músculos, huesos, ligamentos, y en la cabeza. También puede causar síntomas en el sistema nervioso, digestivo, infecciones crónicas en la piel y en el estado en general. Los antecedentes familiares, si existen y son muy importantes.
Es una enfermedad que no puede diagnosticarse a través de pruebas de laboratorio. Los resultados de radiografías, análisis de sangre, biopsias musculares son normales. Por lo tanto, el diagnóstico se basa en un examen clínico de los síntomas de la persona, el cual es llevado a cabo por un médico.
La intensidad de los síntomas varía en cada persona. En muchos de los casos la Fibromialgia puede ser confundida con el Síndrome Crónico de Fatiga.
En el Ecuador se calcula que esta enfermedad está entre el 2 y el 3% de la población, y es más frecuente en mujeres que en hombres, por lo general se ve más casos a partir de los 40 años.
Algunos síntomas que presenta el paciente:
- Dolor generalizado
- Fatiga
- Insomnio
- Síndrome del Intestino Irritable
- Síntomas comunes: menstruaciones dolorosas, dolor torácico, rigidez en las articulaciones, alteración cognitiva de la memoria, adormecimiento en manos, calambres musculares, sequedad de ojos y boca…
- Factores agravantes: cambios en el clima, estrés, depresión y ansiedad.
Hoy en día no existe un tratamiento específico para tratar la Fibromialgia. Según estudios realizados en Estados Unidos y Europa, se ha visto mejoría de los síntomas con tratamientos alternativos como son la Acupuntura y el Masaje.
Estas dos terapias tratan las áreas de dolor, ansiedad y el insomnio.