Hay diferentes patógenos que invaden el cuerpo humano. La función del sistema inmunológico es de proteger el cuerpo contra estos invasores. El sistema inmunológico actúa como un ejército, protegiendo al enemigo. Sin embargo, como un ejército, puede llegar a cansarse de la constante pelea hacia estos invasores. Estos invasores son el estrés, la mala alimentación, las toxinas del medio ambiente y un estilo de vida sedentaria. Cuando el sistema se fatiga, puede perder su capacidad de distinguir entre el cuerpo y un invasor externo, es así como comienza a atacar los tejidos y órganos del cuerpo. Debilitando poco a poco el cuerpo el cual está bajo de defensas. Por lo tanto, un sistema inmune deficiente puede conducir a una variedad de enfermedades y condiciones.
¿Cómo se puede mejorar el sistema inmune?
La acupuntura ayuda a subir las defensas en el organismo. En la medicina tradicional china, el sistema inmune se basa en los canales de energía del riñón, el sistema digestivo, los pulmones y el hígado. Es necesario que todos estos órganos y canales trabajen juntos para una inmunidad óptima. Por lo tanto, es importante ayudar al organismo con tratamientos de acupuntura ó masaje y siguiendo ciertas recomendaciones como por ejemplo:
- Comer alimentos que estimulen el sistema inmunológico, incluyendo verduras verdes como las coles de Bruselas, el brócoli, kale y espinaca.
- Comiendo frutas que tengan vitamina C como los duraznos, las frutillas, el limón, las naranjas, la sandía y las uvas.
- Consumiendo granos como el arroz integral, quinua y avena.
- Comiendo hortalizas de raíz como las zanahorias y remolacha, champiñones sobretodo shiitake y reishi y las hierbas como el té verde, orégano, la menta, el jengibre y la cúrcuma.
- Tomar por lo menos 1000 mg de vitamina C al día como suplemento. Y en épocas de resfríos, tomar suplementos de zinc y echinacea.
- Practicar 30 minutos de ejercicio cardiovascular todos los días, junto con algún tipo de estiramiento y por ultimo practicar la meditación.
¿Qué se debe evitar?
Es importante evitar todo tipo de azúcares procesados y aditivos artificiales. Se debe evitar alimentos fritos y grasos, alimentos extremadamente fríos y crudos, productos lácteos, el café, el alcohol, el tabaco, y el estrés.